Entre las principales cualidades de este subsector del agro está la mayor tasa de formalización laboral, con 44.000 empleos formales
Una de las frutas insignias del agro colombiano es el banano. Este alimento no solo está sembrado en más de 53.000 hectáreas en todo el país, sino que es una de las joyas en materia exportadora gracias al reconocimiento internacional que tiene el sector.
El banano está sembrado principalmente en dos zonas productoras: el Urabá y en el Caribe (La Guajira y Magdalena). En estas áreas se cultivan dos clases de variedades, el Gros Michel, que se consume en el mercado local, y la otra es la variedad Cavendish, que se usa en el exterior. Del total de producción, 95% se exporta y el restante se queda en Colombia.
Entre las principales cualidades de este subsector del agro está la mayor tasa de formalización laboral, con 44.000 empleos formales, donde 92% son sindicalizados. “Somos una de las agroindustrias con mayor asociatividad laboral, no solo en Latinoamérica, sino en el mundo, con un total de 150.000 familias que dependemos de la agroindustria”, explicó Emerson Aguirre, presidente de Augura.
Consumo y exportaciones
Gracias a su alto valor agregado en sostenibilidad ambiental, social y laboral, su principal destino de exportación es Europa, con cerca de 67% de las exportaciones, seguido de Estados Unidos y de último está el Reino Unido.

Uno de los retos del mercado local tiene que ver con el consumo per cápita, puesto que solo se comen cuatro kilos de banano al año, mientras que en Europa asciende hasta 14 kilos. Pero el mercado de banano es muy competido y, con corte a 2023, Colombia está en el quinto lugar de exportación. En la primera posición está Ecuador, seguido de Guatemala, Costa Rica y Filipinas. Los últimos tres con valores de producción muy cercanos.
El año pasado fue retador para el sector y, aunque aún están consolidando cifras con corte a diciembre, la Asociación de Bananeros de Colombia, Augura, proyecta un decrecimiento aproximado de 5% en el rubro de exportaciones.
“Tendremos un año de recuperación bananera, en el que esperamos que el clima tenga una mejor presencia en nuestras zonas de producción. También una mejor reacción de los mercados frente al compromiso del valor agregado que tiene nuestro banano en cuanto a la sostenibilidad social, ambiental y laboral”, dijeron desde el gremio.
Para este año, el panorama pinta mejor, pues Augura cree que las exportaciones pueden crecer en 5%. “También hay que aprovechar la eficiencia que el Canal de Panamá tiene desde el punto de vista operativo y que hay una preocupación por el hermano país del Ecuador, por lo que nosotros también tendríamos una mejor oportunidad de llevar nuestro banano en mayor volumen a Europa”, dijo Aguirre.
Tomado de: Agronegocios