Tomado de: La República
Los analistas modificaron sus proyecciones y ahora están, en promedio $79, más abajo que a inicio de año por menos tensión local
En las últimas semanas el dólar sorprendió al mercado con una tendencia bajista que, por ahora, no frena. La moneda logró romper el piso de los $4.600, los $4.500 y para el último día de la semana pasada cerró a $4.425,43 en promedio.
Por eso, desde LR se realizó un sondeo entre los principales analistas del mercado para conocer cómo han cambiado las proyecciones para 2023, ¿se mantendrá en estos rangos?
El resultado, en promedio, es que la moneda se ubicará en $4.591 para el último trimestre del año, impulsada, en parte por la presión a nivel internacional, perspectivas de baja de tasas de la Fed y un mayor apetito de inversionistas en América Latina.
Felipe Campos, gerente de inversión y estrategia de Alianza Valores, explica que, dado el buen comportamiento de las monedas de la región, que se muestran como las más fuertes del año y el desvío que tiene Colombia frente a las mismas, (pues están por debajo de $3.800), hace que “a medida que el tema político sea moderado, el peso pueda unirse al resto de las monedas”.
En esto coincide Wilson Tovar, jefe de investigaciones de Acciones y Valores, quien señala que al comportamiento de la moneda le será favorable una menor percepción de riesgo país, sumado a un precio de los commodites que defienda la divisa local.
“Esperamos que la segunda parte del año los efectos de la apuesta fiscal del Gobierno rinda sus efectos con un consumo interno apoyado por los subsidios y unos resultados fiscales en línea con lo estimado por el Ministerio de Hacienda”, precisó Tovar.
Sin embargo, Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, explica que esta apreciación que se dio en abril responde al debilitamiento del dólar en EE.UU. y la monetización por un pago de impuestos de grandes contribuyentes con lo que no se contempla que se pueda consolidar en un futuro próximo.
Los analistas consultados dicen que hay una presión bajista a nivel mundial, lo que los ha hecho ajustar sus perspectivas para cierre de 2023, en promedio, $79 y hasta $200 por debajo de lo que se había planteado a inicio de año, cuando la moneda estadounidense estaba por encima de $4.800 e incluso llegó a $4.966,33 en febrero, el nivel más alto del año.
No obstante, las comisionistas no descartan que pueda haber un rebote por coyuntura. Camilo Díaz, gerente de estrategia en Itaú, explica que, si bien el mercado y las monedas están contando con que la Reserva Federal empiece a bajar las tasas a partir de junio, la Fed propone otra situación.
“Dice que sube sus tasas una o dos veces más este año y se queda en esos niveles, entonces marca para un lado diferente al mercado. De eso va a depender que tengamos algo más pronunciado hacia arriba. Imagino un rango entre $4.100 y $4.800”, dice Díaz.
Si bien entre una y otra cifra parece haber bastante diferencia, Díaz dice que es importante que ya no se esté hablando de niveles de $5.000 que sí se tenían contemplados antes.
El peso colombiano, la que más sube entre las monedas emergentes
En lo que va de abril el peso colombiano se ubica como la moneda que más se aprecia entre las monedas emergentes con un crecimiento de 4,71%, seguido por el forínt húngaro que lo hace 3,1% y el real brasileño, 2,7%. Si se revisa el resultado en las monedas de América Latina, la local vuelve a liderar el mercado y después del real brasileño se ubica el peso mexicano con 0,09%. Del otro lado, las que más caen son el peso argentino, -2,84%; luego está el sol peruano, -0,30% y, finalmente, el peso chileno que se ha contraído 0,22% con corte al 14 de abril.
Tomado de: La República