Esto ocurriría a medida que las presiones de precios impulsadas por los costos dañan la demanda interna aún débil.
El mayor riesgo que enfrenta la economía mundial a fines de 2022 podría ser el estancamiento y no la estanflación.
Esto ocurriría a medida que las presiones de precios impulsadas por los costos dañan la demanda interna aún débil y las políticas fiscales y monetarias más estrictas se convierten en un lastre, según Nomura Holdings.
En la mayoría de los países existe un “predominio de un tipo malo de inflación que presiona los márgenes de ganancia, erosiona el ingreso real de los hogares y tiende a autocorregirse cuando la demanda es débil”, dicen.
Además la mayoría de las economías, incluidas la eurozona, Reino Unido, Japón y China, no se han recuperado por completo de la pandemia y son frágiles a riesgos.
Fuente: Portafolio